De 2019 a 2023 el gobierno mexicano lanzó el programa piloto de afiliación de personas trabajadoras del hogar al IMSS y desde el 2024 se convirtió en algo obligatorio, pero las cifras revelan el poco alcance que ha tenido, pues solo 60 mil personas han sido dadas de alta entre 2019 y mediados 2025.
Este sindicato nació en 2015 y su objetivo es, precisamente, que las millones de mujeres que se dedican a este oficio accedan a condiciones dignas de trabajo.
María, que también es trabajadora del hogar y estuvo en las negociaciones de la reforma con las autoridades, explica que actualmente sólo adquieren seguridad social los días que el empleador registre, es decir, los días que la trabajadora visite esa casa y dependen de que la persona quiera hacerlo, pero no todos cumplen con esta norma.
En la mayoría de las casas donde ella trabaja lava el patio y el baño; se sigue a la cocina para lavar los trastes. Después arregla la sala, el comedor, limpia muebles, hace de comer y vuelve a limpiar la cocina. Le pagan entre 350 y 500 pesos al día, dependiendo del empleador. De acuerdo con la ley, lo que hace Gloria debería recibir un pago mínimo de 600 pesos al día.
Las estadísticas del IMSS muestran que, incluso en los salarios para este sector, hay desigualdad de género. El salario diario promedio para un hombre es de 526 pesos. para una mujer, 407 pesos.
Ser trabajadora y de la tercera edad
“En un tiempo, cuando tienes edad, ni se siente. Ahora a esta edad que tengo, ya es pesado, por lo mismo ya no plancho ni lavo a mano”.
El Seguro Social reporta que 40 por ciento de las personas trabajadoras del hogar que fueron dadas de alta tienen entre 55 y más de 75 años. Esto coincide con el perfil vulnerable que describe María de la Luz, la secretaria del Sinactraho. Asegura que la mayoría son adultas mayores, jefas de familias y con una escolaridad promedio de secundaria. A esto se abona otro factor.
¿Qué sigue?
En los últimos 10 años, el Sindicato ha trabajado en difundir información sobre los derechos laborales de las personas trabajadoras del hogar. Imparte cursos de profesionalización e incluso reparte volantes en zonas donde sus trabajos son solicitados. Aun así, consideran que no es suficiente, pues las 3 mil afiliadas en todo el país les parece poco comparado con las más de 2 millones de personas que se dedican a este trabajo en México.

